Asteraceae: Cynara humilis

Cynara humilis

L. (1753)

Sinónimos

Bourgaea humilis (L.) Coss. (1849)

Bourgaea humilis var. cyanea Coss. (1849)

Bourgaea humilis var. leucantha Coss. (1849)

Cynara humilis var. typica Maire in Jahand. & Maire (1934)

Cynara humilis var. leucantha (Coss.) Pérez Lara (1887)

Cynara humilis var. reflexa Batt. ex Jahand. & Maire (1934)

Nombres vernáculos

(cast.) alcachofilla, alcaucil, cardo borriquero, hierbacaujo

(cat.) card formatger, carxofera

Familia

ASTERACEAE (COMPOSITAE) – Asteráceas (Compuestas)

Color de la flor: Azul o azul-violeta, más raramente blanco.

Floración: Marzo a Agosto.

Ecología: Vegetación ruderal y viaria. Se cría entre los herbazales que se forman en los márgenes de caminos y bordes de carreteras, también en los barbechos y bancales abandonados o en los claros del matorral. Indiferente al substrato, prefiere los lugares de suelos más o menos nitrificados, profundos, pedregosos o arenosos y secos. Crece en exposiciones soleadas en áreas abiertas no demasiado frías.

Rango altitudinal: 10 – 1.200 m.

Distribución: Región Mediterránea SW (Ibero-magrebí). Dispersa desde el C y S de la Península Ibérica y Baleares, hasta el N de África (Argelia, Marruecos y Mauritania).

Etnobotánica: Esta alcachofilla como todas las especies del género Cynara, ha sido utilizada desde la más remota antigüedad por los pastores de la cuenca mediterránea para obtener sus quesos tradicionales. Para ello recogen los filamentos de las inflorescencias de donde se puede obtener un excelente cuajo vegetal.

Al igual que las otras alcachofas, sus hojas tiernas antes de la maduración de las espinas, son muy apreciadas para consumir hervidas o en ensaladas. Incluso las grandes pencas de la base de las hojas son comestibles. Como posee unos principios amargos, a toda la planta se le atribuyen interesantes propiedades diuréticas y digestivas.

La presencia de grandes cantidades de inulina, hace que sea apta para el consumo por diabéticos.

Etimología: El epíteto genérico Cynara fue creado por Tounefort como Cinara allá por el 1700 y cambiado a Cynara por S. Vaillant, para posteriormente ser validado por Linneo en 1753.

Para algunos autores al vocablo se le supone un origen desconocido. Otros autores piensan que su origen está en el término griego kynára, -as o en su forma latina cynára, -ae que con toda probabilidad era el nombre empleado para denominar la alcachofera.

Por su parte el término humilis proviene del latín humílis, -e = humilde, bajo; haciendo referencia a su corta talla.